Habemus aniversario |
75 años de paz y unidad en Europa. Sin duda, una fecha, la del 9 de mayo de 1950, que debemos recordar, celebrar y reivindicar. En un contexto internacional extraordinariamente complejo, la Unión Europea tiene que aprovechar este aniversario, no para quedarse en el pasado, sino para recentrar su misión estratégica y decidir, a pasos acelerados, cómo puede seguir siendo un espacio garante de los valores democráticos, de la prosperidad económica y de la solidaridad entre sus miembros.
De aniversario también estamos en España Mejor. Cumplimos 2 años con miles de voluntarios y propuestas en los temas que más preocupan a los ciudadanos españoles: la vivienda, la inmigración y la educación. Desde la sociedad civil, abanderando el sentido común y rechazando de plano la polarización de la clase política. Tampoco podíamos olvidarnos en esta edición del apagón que hemos sufrido recientemente. Y mientras aún se dilucidan las causas, desde nuestra tribuna lo que planteamos es la necesidad de contar con una estrategia nacional de energía. Basada en la evidencia, en el pragmatismo y con una visión a largo plazo. Como todo lo demás. Y permitidme, para terminar, que os agradezca el apoyo que le prestáis a España Mejor. Cada uno como puede. Gracias también al equipo, a los voluntarios, a nuestros patrocinadores, a los medios que os hacéis eco… a todos y cada uno de los que la hacéis posible. Y, por supuesto, gracias a Miriam, por ser la fuerza incansable de este proyecto. Pero necesitamos más músculo. Para que nos escuchen. Un abrazo, España Mejor
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EDITORIAL
Este 9 de mayo de 2025 se cumplen 75 años de la Declaración de Schuman sobre la que se pusieron los cimientos de lo que hoy es la Unión Europea.
En un contexto internacional sumamente complejo, ¿qué papel debe jugar ahora Europa?
La fundadora de España Mejor, Miriam González, abogada de prestigio especializada en comercio internacional, con una trayectoria en la Comisión Europea de más de una década, nos da algunas claves:
ESPAÑA MEJOR CELEBRA SU SEGUNDO ANIVERSARIO: ¡GRACIAS!

¡Lo hemos conseguido! España Mejor llega a su segundo aniversario con la misma energía, pero con más voluntarios y más propuestas.
Ha sido un año muy intenso. La vivienda ha ocupado buena parte del trabajo de los Grupos de voluntarios, con una propuesta de más de 30 medidas centradas en el alquiler asequible, que llevamos hasta el Congreso. La otra gran preocupación de los españoles, la inmigración, también ha estado presente en la actividad de España Mejor y, tras una visita a Canarias, estamos a punto de lanzar una propuesta abordando este asunto desde los datos, el sentido común y una visión a largo plazo.
También hemos presentado una propuesta para mejorar el Servicio Público de Empleo con la Inteligencia Artificial y estamos trabajando en otras iniciativas para aplicar la tecnología a la gestión de la salud y a la atención de los usuarios de las administraciones públicas.
Asimismo, en los próximos meses os haremos llegar propuestas para una política nacional de educación y de agua, de la que se habló mucho a raíz de la tremenda tragedia provocada por la Dana en Valencia.
Y hemos estado presentes en numerosos eventos, nos hemos reunido con un sinfín de organizaciones y partidos políticos. Lo que seguimos teniendo pendiente es que el Gobierno acepte una reunión para hablar del Código Ético con el que hemos estado de ruta desde el pasado mes de agosto.
Nosotros no cejamos en nuestro empeño. Pero una cosa os decimos: Cuantos más seamos, más nos escucharán.
¿A QUÉ ESTÁS ESPERANDO?
LA OPINIÓN DE NUESTROS COLABORADORES
Una Estrategia Nacional de Energía
Por Juan Jaquete, inversor en infraestructura energética
¿Cuáles fueron las causas del apagón? Las verdaderas causas tienen una naturaleza técnica muy compleja, y cada cual aprovechará para vendernos su relato: unos dirán que la causa es la gestión del Gobierno o la falta de experiencia de la presidenta de Red Eléctrica; otros, que las renovables, las eléctricas, las nucleares...
Por el momento, podemos sacar dos conclusiones del apagón del pasado lunes 28 de abril, que no por obvias dejan de ser las más relevantes. La primera es que el sistema eléctrico es y será la base fundamental del funcionamiento de nuestra sociedad y que, consecuentemente, nada se hace más importante que tener un plan claro y consensuado entre todos los agentes sociales para lograr una energía segura, barata y libre de emisiones a largo plazo. La segunda, y aquí está el verdadero problema, es que, sin embargo, España carece de un plan estratégico en materia de energía que, en línea con los objetivos de la Unión Europea y basado en premisas técnico-económicas, y no en dogmatismos ideológicos, nos permita asegurar la buena marcha de nuestro Estado de Bienestar.
Diseñar, desarrollar y construir infraestructuras como centrales renovables, nucleares o redes eléctricas puede llevar entre 5 y 15 años, dependiendo de la tecnología. Pero, además, estas inversiones necesitan horizontes de amortización de entre 30 y 50 años. Es, por tanto, evidente la necesidad de planificar y diseñar un sistema energético a largo plazo, que permita asegurar la operación del sistema y la seguridad de suministro eléctrico, y atraer la inversión necesaria para construir la infraestructura que nos permitirá tener una energía más barata y más limpia.
España y la Unión Europea no son productores de combustibles fósiles, por lo que nuestro presente y futuro energético debe fundamentarse en la electrificación de la economía: como palanca de competitividad, como pilar de seguridad nacional y como herramienta de mitigación de la crisis ecológica.
La electrificación de la economía pasa por invertir en nueva capacidad de energía renovable, redes de transporte y almacenamiento. Más importante si cabe resulta invertir en la electrificación de la demanda energética: transporte, industria y consumo de calor en edificios.
La electrificación tiene principalmente cinco consecuencias positivas.
La primera, su competitividad económica. Las renovables son desde hace años la fuente energética más competitiva, el coche eléctrico tiene un coste total de propiedad (considerando la inversión inicial, el coste del combustible y el mantenimiento) más bajo que el equivalente de gasolina o diésel, y la instalación de aerotermia para calefacción resulta, para la mayoría de las condiciones climáticas del país, en ahorros que compensan con creces la inversión inicial.
La segunda es que la producción local de electricidad permitiría reducir el déficit de balanza comercial por un importe cercano a 31.000 millones de euros anuales, que es el importe neto que los españoles gastamos en 2024 en comprar combustibles fósiles a terceros países, como Rusia, Arabia Saudí o Estados Unidos.
La tercera consecuencia positiva, cada vez más relevante en el contexto actual, es la independencia energética y el consecuente refuerzo de la seguridad nacional, eliminando la dependencia de terceros países.
La cuarta es que la electrificación contribuye de manera casi exponencial a la reducción de emisiones, siendo el elemento más importante en la mitigación de la crisis ecológica. Las renovables y la electrificación de la demanda no solo nos permiten disfrutar de energía libre de emisiones, sino que, al basarse en tecnologías mucho más eficientes, contribuyen a reducir el consumo total de energía primaria.
El quinto impacto positivo es la mejora en la calidad del aire, y la reducción resultante del gasto sanitario y de muertes prematuras, incrementándose con ello la productividad.
España cuenta, además, con ventajas únicas para liderar esta transformación: un alto recurso solar y eólico, disponibilidad de suelo, y empresas, universidades y administraciones con amplia experiencia en renovables y transición energética.
Aprovechemos todo lo anterior y fomentemos un consenso que nos permita construir una sociedad más próspera, competitiva, segura y sostenible en el largo plazo, dentro del proyecto común que compartimos con nuestros socios de la Unión Europea.
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“El proyecto europeo merece la pena”
Borja Muñoz, Policy Advisor Parlamento Europeo
Borja Martín es asesor en el Parlamento Europeo. A sus 27 años, ha trabajado en el Tribunal de Cuentas de la UE y es un europeísta convencido que anima a los jóvenes a implicarse más en el proyecto europeo.
- ¿Quién es Borja?
Borja es una persona comprometida con el servicio público, profundamente europeísta y convencida de que Europa debe estar siempre al servicio de las personas. Desde que me gradué en 2019, he trabajado durante cinco años en el Tribunal de Cuentas de la Unión Europea, donde crecí profesional y técnicamente, especializándome en el control de los fondos europeos. Desde septiembre de 2024, trabajo en el Parlamento Europeo, donde aporto esa experiencia desde una perspectiva legislativa. Estas dos etapas me han dado una visión completa de cómo se construye Europa, tanto desde el control y la evaluación de las políticas como desde el impulso político y el desarrollo de estas. Creo en el poder transformador de las ideas, pero sobre todo en su aplicación práctica: en convertir las políticas públicas en soluciones reales. En lo personal, me defino como alguien curioso, con vocación por el diálogo, el trabajo en equipo, el mérito y el respeto institucional.
- ¿A qué te dedicas actualmente y cómo es tu día a día?
Actualmente, trabajo como Asistente Parlamentario Acreditado (APA) en el Parlamento Europeo, colaborando con una eurodiputada del Grupo del Partido Popular Europeo (PPE), miembro de la Comisión de Empleo y Asuntos Sociales y de la Comisión de Desarrollo Regional. Mi labor es eminentemente legislativa: analizo propuestas de reglamentos y directivas, redacto enmiendas, preparo discursos y brindo asesoramiento técnico sobre los principales temas que se debaten en ambos comités, especialmente aquellos vinculados al empleo, la inclusión social y los fondos europeos.
Lo cierto es que cada día es distinto e impredecible; la agenda cambia constantemente. Aun así, en general combino el seguimiento del trabajo legislativo en Bruselas y Estrasburgo con la preparación política de los expedientes que lleva mi eurodiputada. También participo en reuniones con expertos, organizaciones y representantes de la sociedad civil y de otras instituciones, tanto nacionales como europeas, con el objetivo de incorporar distintas voces al proceso legislativo y a nuestro trabajo diario. Es un trabajo exigente, pero apasionante, porque me permite estar en el centro del debate europeo y contribuir, desde mi perfil técnico, a mejorar la vida de millones de ciudadanos.
- ¿Siempre tuviste claro que querías desarrollar tu carrera en la Unión Europea?
La verdad es que no. Al terminar la carrera, mi idea era seguir los pasos de mi madre —que ha sido siempre una gran referencia para mí— y dedicarme al sector bancario. Lo típico: empezar en una gran consultora, estar unos años formándome y después dar el salto a la banca, probablemente en el Reino Unido, donde estudié. En aquel momento, además, justo en plena transición del Brexit, las carreras en instituciones europeas no eran precisamente lo más visible ni popular entre los jóvenes profesionales allí.
Mi perspectiva cambió cuando tuve la oportunidad de hacer unas prácticas en el Tribunal de Cuentas Europeo. Me debatía entre aceptar una oferta como junior en una consultora o lanzarme a esta aventura institucional en Luxemburgo. Decidí apostar por lo segundo, por probar algo diferente… y, desde luego, no me equivoqué. Aquella decisión marcó un antes y un después, no solo en mi carrera profesional, sino también en mi manera de entender Europa y el papel que podemos desempeñar dentro de ella.
- ¿Cómo te has preparado para llegar hasta aquí?
Creo firmemente que de cada etapa se aprende algo valioso. Estudiar la carrera en el Reino Unido fue una experiencia muy formativa, no solo por el contenido académico, sino por el enfoque práctico y la exigencia de autonomía. Allí aprendí que nadie te va a dar nada hecho, y que si quieres avanzar, tienes que espabilar, organizarte y ser constante.
Desde primero de carrera, tuve claro que quería aprovechar al máximo el tiempo, así que me propuse dedicar todos los veranos a hacer prácticas. Sabía que la experiencia laboral temprana es clave para salir de la burbuja académica —ese bucle de exámenes, trabajos y presentaciones— y empezar a entender cómo funciona el mundo real. Esas prácticas me ayudaron a madurar, a desarrollar disciplina y, sobre todo, a prepararme antes para lo que vendría después.
Cuando empecé en el Tribunal de Cuentas Europeo, era el más joven de toda mi promoción de trainees (prácticas), y cuando me fui, cinco años después, era el empleado más joven de la institución. Esa trayectoria no ha sido fruto de un plan perfectamente diseñado, sino de aprovechar cada oportunidad con ganas de aprender y de contribuir.
- Has pasado por distintos puestos e instituciones. ¿Cómo han influido esas etapas en tu visión de la UE y de tu propio futuro profesional?
Cada institución europea es un mundo en sí misma, con su propia lógica, ritmo y misión. Haber trabajado durante cinco años en el Tribunal de Cuentas Europeo marcó profundamente mi forma de entender la Unión. Es probablemente una de las instituciones más técnicas del sistema comunitario, con un equipo de profesionales de altísimo nivel, de quienes aprendí no solo a nivel técnico —en fiscalización, control y ejecución presupuestaria— sino también en lo humano.
Cuando decidí emprender una nueva etapa en Bruselas y redacté mi carta de despedida, una de las frases que incluí fue: “Es una institución que valoro profundamente, no solo por su misión y su labor, sino también por la humanidad de quienes forman parte de ella.” En el Tribunal adquirí una visión crítica y constructiva sobre cómo se ejecutan las políticas europeas, especialmente la política de cohesión, y sobre qué áreas necesitan mejorar. Esa experiencia es la que hoy intento aportar en el Parlamento Europeo, desde el terreno legislativo.
Ahora bien, la dinámica en el Parlamento es completamente distinta. Aquí todo es más amplio, más político y muchas veces imprevisible. El ritmo es más rápido y depende mucho del eurodiputado o del gabinete en el que trabajes. En mi caso, he tenido mucha suerte: el equipo humano de mi delegación es inmejorable y, en particular, mi oficina y mi eurodiputada —que tiene un perfil técnico muy sólido en asuntos regionales y locales— me están enseñando muchísimo sobre este otro mundo que es la política institucional desde dentro. Para mí, está siendo una experiencia de gran aprendizaje y crecimiento, que completa a la perfección la etapa más técnica vivida en Luxemburgo.
- ¿Crees que la Unión Europea está lejos de los jóvenes? ¿Qué nos falta para sentirla más cercana?
Sí, creo que en muchos casos está lejos. O, mejor dicho, que se percibe lejana. Hay una desconexión entre lo que Europa realmente ofrece y lo que muchos jóvenes creen que es. La mayoría no es consciente de que la Unión no es solo una normativa sobre reciclaje o un "tapón pegado a la botella de plástico". La UE es también Erasmus+, es poder viajar a Laponia, a Berlín o a la Polinesia Francesa sin visado. Es recibir ayudas para tu primer contrato de investigación o que exista un AVE que conecta ciudades gracias a los fondos de cohesión. Europa está muy presente en nuestro día a día, pero no se está sabiendo contar bien.
El problema de fondo, en mi opinión, es que no se ha construido suficientemente una identidad europea real. Muchos jóvenes sienten que Europa es un “club” del que se forma parte por conveniencia, pero no como algo con lo que se identifican. Europa tiene unos valores comunes sólidos —la democracia, la paz, la igualdad, la libertad—, pero estos se diluyen cuando las identidades nacionales lo invaden todo y no se les da espacio desde una edad temprana.
Todo empieza por la educación. Necesitamos integrar mucho más Europa en las aulas, no como una asignatura más, sino como una parte fundamental de lo que somos. Solo así se puede construir un sentimiento europeo genuino, que no compita con lo nacional, sino que lo complemente. Porque, al final, ser europeo también es ser joven, tener oportunidades, poder elegir y construir un futuro mejor en común.
- ¿Qué le dirías a alguien que quiere trabajar en la UE pero no sabe por dónde empezar?
Le diría, lo primero, que no se agobie si no tiene claro por dónde empezar, porque es algo bastante común. El mundo de las instituciones europeas puede parecer lejano, complejo o incluso inaccesible desde fuera, pero no lo es. Lo importante es empezar por investigar: conocer qué instituciones, agencias y organismos forman parte de la Unión, qué tipo de perfiles buscan y qué tipos de contratos existen. Existen prácticas, contratos de agente contractual, temporales, e incluso la posibilidad de optar a una plaza permanente a través de las oposiciones europeas, aunque estas últimas requieren una preparación a largo plazo.
El segundo paso es aplicar. A todo lo que encaje. Sin miedo. Muchos procesos pueden parecer impersonales o muy competitivos, a veces incluso largos, pero al final todo empieza con una solicitud enviada a tiempo. Cuanto antes se empiece, mejor. Y una vez que te dan una oportunidad, hay que aprovecharla al máximo. Da igual si es una beca de prácticas o un contrato de un año: todo suma, y en este entorno, la actitud, la capacidad de adaptación y las ganas de aprender son fundamentales.
También les diría que no se obsesionen con Bruselas. Hay muchas oportunidades también en Luxemburgo o en las agencias descentralizadas repartidas por toda Europa. A veces se empieza desde fuera del “centro neurálgico” y eso da una perspectiva muy valiosa. Me pasó a mí, empezando fuera de Bruselas.
Y, por último, les diría que si realmente creen en el proyecto europeo, vale la pena. Porque no siempre es fácil explicar fuera a qué te dedicas o cuál es tu función, pero cuando entiendes que tu trabajo, desde el lugar que te toque, ayuda a construir mejores políticas públicas, a reforzar la cooperación entre países o a mejorar la vida de millones de personas, es entonces cuando cobra sentido.
La defensa y el futuro de Europa, protagonistas del Foro de Periodismo 2030

Miriam González y el coronel Pedro Baños han sido los ponentes principales del Foro de Periodismo 2030 que se ha celebrado el 6 de mayo en la Universidad Europea Miguel de Cervantes, en Valladolid. La jornada ha reunido a expertos, periodistas y estudiantes para debatir sobre los desafíos geoestratégicos que afronta el mundo.
Durante el evento, se ha presentado el XI Informe de Riesgos Futuros de la Fundación AXA, elaborado a partir de una encuesta realizada a 20.000 personas en 15 países. El estudio ha revelado una creciente preocupación por los riesgos geopolíticos y el cambio climático.
En su intervención, nuestra fundadora ha señalado que "debemos cambiar la forma de pensar Europa si queremos ser competitivos", subrayando la necesidad de adaptarse a la revolución tecnológica. Por su parte, el coronel Pedro Baños ha advertido sobre la importancia de desarrollar tecnologías propias para evitar la dependencia de otras potencias.
El acto ha contado con la presencia de autoridades como el consejero de Economía y Hacienda de la Junta de Castilla y León, Carlos Fernández Carriedo, y el alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero.
Miriam González y España Mejor, Premio El Debate a la Proyección de España

Nuestra fundadora, Miriam González, recibirá el Premio El Debate a la Proyección de España en una ceremonia que tendrá lugar el próximo 26 de mayo en Madrid.
El diario digital El Debate ha decidido otorgar este galardón a Miriam en la categoría de Cultura. Compartirá escenario con Iberdrola, en la categoría de Empresa, y la revista ¡Hola!, en la de Comunicación.
El Debate ha premiado en ediciones anteriores al Real Madrid, Isambard Wilkinson y José Luis López-Linares en 2023; y a Telefónica, Tunku Varadarajan y la Real Academia Española en 2024.
NUEVA SECCIÓN:
LA PLAYLIST DE ESPAÑA MEJOR

Desde España Mejor, queremos ponerle música a las emociones, desafíos y realidades que vivimos cada día.
Por eso lanzamos una nueva sección: “La Playlist de España Mejor”.
Cada dos jueves, seleccionamos un par de canciones que acompañen a quienes enfrentan la precariedad, el exilio, los estudios interminables o los alquileres imposibles.
Un espacio para compartir, escuchar y sentir que no estamos solos.
Puedes seguirla en Spotify y proponer tus propias canciones en redes con el hashtag #EspañaMejorPlaylist.
PRÓXIMOS EVENTOS
Foro Expansión
21 y 22 de mayo, Madrid

Miriam González participará en el VI Foro Internacional Expansión en un diálogo junto a Enrico Letta primer ministro de Italia entre 2013 y 2014.
El Foro contará con la presencia de numerosos líderes políticos, empresariales e institucionales que se reunirán para para debatir sobre los desafíos globales para una nueva era económica, geopolítica y tecnológica.
Foro Económico y Social del Mediterráneo, Prensa Ibérica
18 de junio, Málaga

España Mejor también estará presente en la II edición del Foro Económico y Social del Mediterráneo, que se celebrará en Málaga, los días 17 y 18 de junio. Nuestra fundadora, Miriam González, será una de los ponentes que participarán en la iniciativa del grupo Prensa Ibérica y la Fundación la Caixa.
Santander WomenNOW
19 de junio, Madrid

Consolidado como el congreso sobre liderazgo femenino más relevante de Europa, Santander WomenNOW celebra este año su VII edición los días 18 y 19 de junio. Miriam González será entrevistada en directo sobre un tema clave: Cómo construir un país mejor.
Gala Premios DEC
19 de junio, Madrid

El 19 de junio, en la sala Florida Park, tendrá lugar la Gala de los Premios DEC, en la que se estima se congreguen más de 300 directivos. Miriam González Durántez, presidirá el jurado de esta edición.
RUTA DEL CÓDIGO ÉTICO
DEL GOBIERNO

Desde España Mejor seguimos recorriendo el país con la Ruta del Código Ético del Gobierno, una iniciativa para acercar a la ciudadanía un documento con 99 compromisos básicos para mejorar la política desde dentro.
El Código Ético es un documento autoregulatorio dirigido al Presidente, vicepresidentes y ministros, pero con traducción directa en gobiernos autonómicos y locales. Incluye medidas sobre conflictos de interés, puertas giratorias, uso de recursos públicos, transparencia, rendición de cuentas y selección de asesores.
Ya hemos estado en más de diez comunidades autónomas y nos hemos reunido con instituciones, ciudadanos y empresarios. El objetivo es aumentar la presión social para que el Gobierno apruebe el Código.
Tú también puedes ayudarnos a moverlo. Esto es de TODOS.

¿Quieres llevar nuestras propuestas al pleno de tu Ayuntamiento? Te decimos cómo:

Si tienes certificado digital o Cl@ve Pin, puedes presentarlo por registro electrónico desde https://rec.redsara.es/.
NO OLVIDES ADJUNTAR LA PROPUESTA Y FIRMAR DIGITALMENTE LA SOLICITUD
Puedes encontrar nuestras propuestas pinchando en los siguientes botones:
Una vez enviada, puedes escribirnos a hola@esmejor.eu para avisarnos de que la has registrado.
A continuación puedes ver también un tutorial para registrar cualquier propuesta a través del Registro Electrónico General.
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